Invertir en terrenos residenciales en la Riviera Maya
En un mercado lleno de nuevas preventas de departamentos, hay un punto que casi nadie menciona: el inventario de casas amplias y funcionales es muy limitado. Esa diferencia entre oferta y necesidad real hace que invertir en terrenos residenciales sea una estrategia sólida para adelantarse a una demanda que sigue creciendo.
La tierra te da opciones. Puedes construir, esperar, vender o rentar. Además, esta flexibilidad no existe en la mayoría de los productos inmobiliarios y la vuelve ideal para construir patrimonio con fundamentos.
Si quieres ver un ejemplo real, consulta Tierra Madre, un desarrollo residencial pensado para inversionistas que desean entrar en una zona con fuerte proyección.
Mucho de este análisis lo trabajo con inversionistas y con mi propio equipo de ventas. Observamos cómo se mueve la zona, qué producto falta y qué señales anticipan crecimiento. Con esa información evaluamos cuándo tiene sentido invertir en tierra.
Plusvalía al invertir en terrenos residenciales desde etapas tempranas
Entrar en etapas iniciales cambia los resultados. Proyectos que hoy inician cerca de 1.6 millones de pesos pueden aumentar entre veinte y treinta y cinco por ciento en tres a cinco años. Esto depende del desarrollo urbano y del ritmo de consolidación.
Por otro lado, para quienes buscan una estrategia simple y sin operación diaria, este modelo funciona muy bien. La plusvalía hace el trabajo. Solo se necesita elegir bien el momento de entrada.
Construir donde el mercado busca más espacio
Alta demanda de casas, baja oferta disponible
Cuando reviso inventario con mi equipo, la conclusión es la misma: hay demasiados departamentos y muy pocas casas diseñadas para familias. Esto abre una oportunidad para quienes construyen sobre su propio terreno.
En zonas consolidadas de Playa del Carmen, las viviendas nuevas se venden desde cuatro hasta más de siete millones de pesos. Los compradores valoran espacio y privacidad. Por eso, construir sobre terreno propio permite competir en un rango que los departamentos casi nunca alcanzan.
Además, cada inversionista decide cuándo vender. Puede hacerlo en etapa de obra o entregar la casa terminada para maximizar la ganancia.
Modelo híbrido: flujo primero, ganancia después
Construir, rentar y vender
Este modelo lo aplican muchos inversionistas. Consiste en construir una vivienda, rentarla durante dos o tres años y venderla después. Combina ingresos mensuales con apreciación del valor del inmueble.
Es ideal para quienes buscan liquidez mientras construyen patrimonio. Primero flujo, después una salida con ganancia acumulada.
Por qué la tierra supera a otros productos
La mayoría de los desarrolladores seguirá construyendo departamentos por rapidez y escalabilidad. Aun así, la necesidad de casas sigue creciendo. Esa diferencia entre lo que se construye y lo que se busca crea condiciones favorables para quienes invierten en tierra.
La tierra permite planear sin prisa, adaptarse al mercado y construir un activo flexible. En zonas como Playa del Carmen y la Riviera Maya, esta flexibilidad se convierte en una ventaja competitiva.
Si quieres revisar una zona específica, analizar números o estructurar una estrategia por etapas, puedo ayudarte con los mismos criterios que utilizo al entrenar a mi equipo y asesorar a desarrolladores de la región.
